Lejos quedan ya aquellas palabras de José Mourinho un 11 de diciembre de 2010 estaba inmerso de lleno en el dilema de elegir entre Gonzalo Higuaín o Karim Benzema para la delantera de su Real Madrid. Un equipo de autor, para el que el técnico portugués quería confeccionar un once hecho a medida de sus ideales. Y lo logró, pero siempre le flaqueó esa posición. Al menos eso era lo que él pensaba, pero el paso del tiempo le ha quitado la razón.
"Si no tienes perro para ir a cazar, tienes que ir con el gato; sólo no puedes ir". Por aquel entonces, se avecinaba el mercado de invierno y Mourinho pedía a gritos, y a su ‘Especial’ (léase en inglés) manera, el fichaje de un delantero centro. Se acababa de confirmar la baja de larga duración de Higuaín por una hernia discal, y el único delantero centro puro que quedaba en la plantilla era Karim Benzema. ‘El gato’, para el técnico portugués, que con estas palabras dejaba bien clara su postura sobre quién era su favorito para el puesto.
Pero con el paso de los años, Karim Benzema se ha convertido en uno de los mejores delanteros del mundo. Un artista en su posición. Ojo, delantero a secas, que no delantero centro. Porque Benzema no puede ser considerado un ‘9’. Y como si de un gusano de seda se tratase, el francés ha experimentado también una metamorfosis y ha pasado de ser un gato, para ser un pez. Sí, un pez. Porque el de Lyon se mueve como pez en el agua por todo el terreno de juego.
Las estadísticas le avalan
A pesar de ser el propietario del ‘9’ en el Madrid desde que se fuera Raúl y Cristiano heredara el ‘7’, Benzema ha demostrado siempre que ese no es el número que mejor le define. Su calidad es incontestable, pero desde la marcha de CR7 ha incrementado exponencialmente tanto su participación e influencia en el juego como sus goles. A pesar de las críticas que ha recibido siempre por su falta de gol, el francés es el 5º máximo goleador histórico del Real Madrid con 244 tantos, por detrás de algunas leyendas del club como Santillana, Di Stéfano, Raúl o el mismo Cristiano.
Desde la salida del crack portugués en el verano de 2018, Karim se ha convertido en el principal argumento ofensivo del conjunto blanco. Se ha echado el equipo a la espalda y ha aumentado considerablemente tanto su influencia en el ataque como sus números goleadores.
En la 2016/17 y la 2017/18, las dos últimas temporadas de Cristiano en Madrid, el futbolista galo promedió 33’2 y 36’2 toques por partido, y 17’9 y 22’5 pases por partido respectivamente. Si estos datos de Sofascore los comparamos con la etapa post-CR, se observa un incremento de su participación con la pelota. En la 2018/19 y la campaña actual, tuvo una media de 45’7 y 47 toques por partido, y 27’1 y 28’6 pases por partido.
Un delantero con alma de ‘todocampista’
Benzema aparece en cualquier posición y cualquier zona del campo. Tanto se le puede ver descolgándose de los centrales para recibir entre líneas, como cayendo a cualquiera de las dos bandas. Mucha culpa de ello la tiene también Zidane. La libertad que le otorga ZZ le convierte en un futbolista total que se mueve como pez en el agua en cualquier parcela del terreno de juego.
Es un jugador muy inteligente. Detecta siempre los problemas futbolísticos que tiene el equipo en cada momento e intenta poner solución a ello. Los estándares del fútbol dicen que un delantero centro está para marcar goles. Pero Karim es mucho más que eso. Desde la posición de delantero centro aparece en todas las zonas de tres cuartos para ayudar tanto en la construcción, como en la asociación y la finalización. La influencia de Benzema en el fútbol del Madrid es mucho mayor de lo que aparentemente se cree. Cada vez que la jugada pasa por sus botas mejora notablemente, y el juego del conjunto blanco se hace más maleable y fluido.
Como ya he comentado, no se le puede considerar un ‘9’ como tal, sino que es un jugador mucho más ‘10’. De hecho, las zonas que más suele ocupar son las de un segundo delantero e incluso, en ocasiones, de media punta. Busca continuamente entrar en contacto con la jugada. Y es que una de las principales cualidades de Benzema es trazar conexiones a partir de recibir en zonas intermedias. Zonas muy difíciles de defender. Más si cabe si el que ocupa esos espacios es el delantero centro, ya que se convierte en un dolor de cabeza constante para los centrales porque pierden la referencia del punta.
Le ha resultado complicado, pero finalmente Karim Benzema ha conseguido ganarse al Bernabéu. Un público siempre difícil de contentar pero que, desde la salida de Cristiano Ronaldo, busca desesperadamente la figura de un líder al que idolatrar y seguir fielmente. El francés es un futbolista completísimo que ha estado muchas temporadas cuestionado en el Real Madrid por su –supuesta- falta de gol. Pero su aportación va mucho más allá de su capacidad goleadora, y con todo el fútbol que genera, se convierte en un surtidor constante de ocasiones.