Estocolmo es la capital y ciudad más grande de Suecia, formada por 14 islas que desembocan en el mar Báltico, por lo que también se le conoce como la ‘Venecia del Norte’. El origen del nombre de la ciudad se debe a la época en que los nativos holmienses tenían que defender sus tierras; para ello, colocaban troncos apilados, cuya acción se denomina ‘stack’ en sueco, en las orillas del lago Mälar, para evitar que los barcos enemigos se acercaran a su territorio. Stadsholmen era el nombre de una de las antiguas islas de la ciudad vieja, y con la que se acabó formando el nombre con el que la conocemos actualmente, Stockholm.
Los inicios del siglo XIX no serían del todo buenos para la ciudad escandinava. Hay que remontarse hasta la segunda mitad del siglo para que veamos la recuperación de la relevancia de Estocolmo sobre el país, con la aparición de nuevas industrias, hecho que la convertirá en un centro importante de comercia y la puerta de entrada a Suecia por la vía marítima.
Con una creciente industrialización y con la celebración de los Juegos Olímpicos en 1912, la cultura futbolística nace en una ciudad en la que viven cerca de 350.000 personas. Atrapados por el juego inglés, surgen numerosos aficionados alrededor del futbol, y por consiguiente, el nacimiento de nuevos clubes. En este contexto surge una de las rivalidades más especiales y más feroces del norte de Europa, el llamado ‘Derbi de los Gemelos’ de la capital sueca, el Tvillingderbyt.
Hermanos gemelos, y revueltos
AIK Solna y Djurgårdens son esos hermanos gemelos. El primero de ellos fue fundado en febrero de 1891 por la familia Behrens, bajo la idea de crear una entidad en la que englobar todos los deportes. No fue hasta el 1896 cuando Sigfrid Stenberg, un ingeniero sueco que escribió sobre deporte después de su visita a Oslo, introdujo el futbol en el club. Por su parte, los Blåränderna (en sueco ‘Los de las rayas azules’), apodo con el que se conoce al Djurgårdens, fueron concebidos en una cafetería por un grupo de jóvenes de clase trabajadora. La sección futbolística, en este caso, fue creada en 1899, tres años más tarde el AIK. Uno era el hermano rico, el otro el pobre.
El primer partido entre ambos tuvo lugar en 1899, mismo año en el que nace la sección de futbol del Djurgårdens. Las circunstancias de este primer encuentro fueron bastante peculiares. A pesar de la victoria por parte del AIK por 2 goles a 1, lo más reseñable fue que los postes de la portería eran pilas de trozos de madera y la red de la portería estaba hecha con una cuerda.
Cada hermano tiene su propia casa. Y es que los aficionados de cada club se muestran diferenciados por el territorio en el que viven. Tradicionalmente, el corazón de la ciudad donde se encuentran la mayor parte de aficionados del AIK es en la zona norte, conocida como Solna, y que los fans del Djurgårdens utilizan para mofarse de ellos, ya que es una zona periférica de Estocolmo. Ellos, en su caso, son originarios de la isla homónima que flota en el archipiélago en el centro de Estocolmo.
En la actualidad, esta isla alberga el museo dedicado al grupo de música sueco ABBA, pero en su día fue el hogar de un astillero en el que trabajaban mucho de los jóvenes que acabarían siendo los primeros jugadores que formarían el club, todos de clase trabajadora. Hoy en día, Djurgårdens está visto como el club de la clase media, mientras que el AIK tiene una base de seguidores mucho más amplia, tan amados como odiados por el resto del país. El tercero en discordia, el pequeño pero amado Hammarby IF, representa la tradición, la sencillez y la humildad. Por eso es ‘el club del pueblo’.
Más allá del futbol
La rivalidad entre ambos clubes traspasa la frontera del futbol. Tal y como comentábamos, tanto AIK como Djurgårdens son entidades que surgieron con la voluntad de tener un carácter social. De hecho, el nombre original del AIK fue Allmänna Idrottsklubben, lo que significa ‘Club de Deportes General’. Por esto mismo, la rivalidad también se traslada al hockey sobre hielo, cosa que hace aumentar esta tensión. Son los dos únicos clubes en Suecia que han ganado más de un campeonato liguero tanto en futbol como en hockey sobre hielo.
En la actualidad, tanto AIK como Djurgårdens son dos de los equipos más populares y con más aficionados del país. Y si por algo es conocido el club azul y negro es por la larga tradición de grupos organizados de hinchas. A finales de la década de los ’40 se fundó DIF Supporters Club, que acabó derivando la facción más conocida, los Blue Saints. Actualmente, el grupo ultra activo más antiguo es Ultra Caos Stockholm. Tal y como ellos mismos afirman, “UCS tiene raíces en la contracultura ultra, con mucha inspiración de lo que actualmente se ve en el sur de Europa, siempre salvaguardando nuestra propia historia y nuestros pilares mientras nos inspiramos en otros”.
Por eso, centrándonos en lo que ocurre en las gradas, nos encontramos con una rivalidad espectacular al más puro estilo británico: Adidas, capucha y cerveza. UCS contra Black Army 1981. Los Blåränderna contra los Gnaget, apodo con el que se conoce a los seguidores del AIK. Da igual si se juega en el Friends Arena o en el Tele2 Arena, los hermanos gemelos están destinados a encontrarse siempre en el camino, en el de la victoria y en el de la derrota, como ocurrió en 1891.